La Legislatura de Neuquén suspendió con una abrumadora mayoría a la vicegobernadora Gloria Ruiz por el escándalo de corrupción con su hermano y la dejó al borde de la destitución, a pesar de un intento desesperado de conseguir el apoyo de Javier Milei para frenar el proceso.
En una sesión caliente, la Legislatura aprobó el miércoles aprobó con 25 votos la suspensión de Ruiz y con 29 votos la creación de la comisión investigadora, que tendrá un mes para expedirse.
La vice mostró su absoluta soledad ya que no tuvo ningún voto a favor: sólo el kirchnerismo y la izquierda se abstuvieron en ambas votaciones. En tanto, un radical y tres legisladores del MPN votaron en contra del artículo que estableció la suspensión.
Los números de la votación dan cuenta que Ruiz está muy cerca de ser destituida ya que para eso se necesitan dos tercios del cuerpo, es decir 25 votos. Ni quienes se abstuvieron ni quienes votaron en contra de la suspensión la defendieron y solo hubo un ausente.
Figueroa rompe con su vice por un escándalo de corrupción y la deja al borde de la destitución
Ruiz denunció un golpe en su contra por la pelea política que mantiene contra el gobernador Rolando Figueroa y calificó el proceso en su contra como «inconstitucional» y un «atropello». «No existe una sola prueba», aseguró sobre las denuncias de desvío de fondos a su hermano, que era coordinador de la Legislatura y recibió 30 millones de pesos en su cuenta personal.
«Quiero dejar constancia que voy a ejercer mi derecho constitucional a defenderme», advirtió Ruiz durante la sesión. La vía judicial es la única que le queda a la vicegobernadora, que mostró que no tiene ningún apoyo en la Legislatura y tampoco consiguió respaldos nacionales.
En ese contexto, Ruiz apostó a conseguir un apoyo de la Casa Rosada, pero no tuvo éxito. La vice tenía una relación política cercana con la diputada nacional Nadia Márquez, al punto que se hablaba de un acuerdo electoral entre ambas para 2025, pero la referente de La Libertad Avanza se llamó a silencio y le soltó la mano.
En una jugada desesperada, Ruiz buscó abrir una línea con la Casa Rosada pero no tuvo éxito. La muestra más cabal de esto fue que Ruiz anunció el martes por la tarde que había contratado como su abogado defensor a Francisco Oneto, ex candidato a vicegobernador de LLA en la provincia de Buenos Aires, cercano a Agustín Laje y que también defendió a Milei.
Pero sorpresivamente el miércoles por la mañana Oneto anunció que renunciaba a la defensa de Ruiz, sin dar mayores explicaciones. El propio Oneto había informado un día antes que se hacía cargo de la defensa. La versión en Neuquén es que desde la Rosada habrían pedido no inmiscuirse en la pelea interna de la provincia.
Ruiz sugirió que se trató de una maniobra de Figueroa. «Si presionaron para bajar al abogado que contraté, imagínense cómo estarán presionados varios legisladores para cambiar su voto, ya que no comparten este atropello a la democracia», afirmó.