Un inspector de tránsito de la ciudad santafesina de Rosario, identificado como Víctor C., fue acusado de vender éxtasis y otras drogas sintéticas en fiestas electrónicas y mediante entregas a domicilio, según informaron las autoridades judiciales.
La investigación, liderada por los fiscales federales Santiago Alberdi y Franco Benetti, culminó en un allanamiento en el domicilio del sospechoso, ubicado en la zona sur de la ciudad, donde se incautaron pastillas valoradas en aproximadamente siete millones y medio de pesos.
El juez de Garantías, Carlos Vera Barros, ordenó la prisión preventiva del inspector de tránsito por un período de 90 días. Mientras tanto, su pareja, Eliana C., y otro implicado en el caso, Marcelo V., fueron puestos bajo arresto domiciliario. Hasta el momento, no se ha informado si la imputación ha provocado alguna acción por parte de la Municipalidad de Rosario, donde el acusado desempeñaba sus funciones laborales.
De acuerdo con el diario La Capital, la investigación, que se desarrolló durante varios meses, fue llevada a cabo por la División Antidrogas de la Policía Federal de Rosario. Según fuentes judiciales, Víctor C. utilizaba la aplicación de mensajería Telegram para contactar a sus clientes, operando bajo el alias “Willy Wonka”, en referencia al conocido personaje de la literatura infantil.
Los fiscales Alberdi y Benetti, quienes colaboran con la oficina de Narcocriminalidad del área de Delitos Complejos de Rosario, señalaron que Víctor C. distribuía las drogas de diversas maneras. En el modo de entrega a domicilio, fue observado junto a su pareja en un Chevrolet Cruze, realizando entregas a clientes que subían al vehículo para recibir los productos. Además, se le acusa de vender drogas en fiestas electrónicas, donde presuntamente trabajaba en conjunto con Marcelo V. para ofrecer las sustancias a los asistentes. Estas actividades se habrían llevado a cabo desde el mes de septiembre, según la acusación.
El allanamiento en el domicilio de Víctor C., ubicado en Gaboto al 5700, en el barrio Triángulo, resultó en la incautación de más de 400 pastillas de éxtasis y alrededor de diez gramos de metanfetamina. Las autoridades estiman que el valor de mercado de lo confiscado ronda los 7,5 millones de pesos.
Y días atrás, en un operativo antidrogas que se extendió por tres meses, las autoridades de Concordia lograron desarticular un clan familiar dedicado al tráfico de cocaína en varias provincias del país.
La investigación, que fue ordenada por el Juzgado Federal de Concordia, se inició tras el decomiso de más de dos kilos de cocaína que una mujer de nacionalidad peruana llevaba adheridos a su cuerpo, según informaron las autoridades.
El análisis del teléfono móvil incautado a la detenida permitió a los investigadores identificar los roles y conexiones dentro de la organización, compuesta por individuos de diversas nacionalidades, incluidos argentinos, bolivianos y peruanos.
La mujer arrestada en septiembre era la encargada de entregar la droga, mientras que un recluso de la Unidad Penal N° 3 “Teniente Coronel José Boglich” coordinaba la distribución local en Entre Ríos.
Con la información recabada, el magistrado a cargo emitió órdenes de allanamiento en cuatro ubicaciones: la Unidad Penal N° 3, la Unidad Penal Femenino N° 6 en Paraná, y dos inmuebles en Villa Celina, en el partido bonaerense de La Matanza.
Durante los registros, los agentes encontraron 270 gramos de cocaína, una balanza de precisión, 30 teléfonos móviles, una computadora portátil, tarjetas de memoria, 200.000 pesos argentinos y 100 dólares, entre otros elementos de interés.
Como resultado de los operativos, un hombre y una mujer, ambos de nacionalidad argentina, fueron detenidos y permanecerán bajo custodia en el Escuadrón 4 “Concordia” de la Gendarmería Nacional.