Emilia Attias y su hija Gina vivieron un viaje de película. En medio de las vacaciones de invierno argentinas, madre e hija aprovecharon el verano europeo para hacer una escapada exprés a París, donde compartieron las fotos de momentos únicos y dejaron ver la conexión tan especial que las une.
“24 horas en París. Solo ella y yo”, escribió Emilia en Instagram, resumiendo en una sola frase lo que significó esta aventura madre-hija. Desde que comenzaron el recorrido por la ciudad, ambas se mostraron relajadas, sonrientes y con looks cómodos pero con mucho estilo, ideales para recorrer la capital francesa bajo el calor de julio.
Una de las primeras paradas fue en el icónico metro parisino, donde se las vio viajando como locales, lejos del glamour y cerca de la experiencia cotidiana. Gina combinó una mini blanca con campera corta y botas claras, mientras que Emilia, que sorprendió con un detalle íntimo, optó por tonos neutros y accesorios sobrios.
La postal más comentada fue la que compartieron en una cabina de la célebre rueda gigante, con el horizonte de París desplegado detrás. Abrazadas, riendo y con la Torre Eiffel de fondo, madre e hija reflejaron una intimidad entrañable que traspasó la pantalla.
Durante la noche, se acercaron al monumento más emblemático de Francia y se sacaron selfies bajo las luces de la Torre, inmortalizando un momento que parecía sacado de una película romántica, pero protagonizado por el amor familiar.
El paseo también tuvo paradas culturales: una librería parisina con libros de moda y fotografía captó la atención de ambas. Dior, el Louvre y la alta costura fueron algunos de los títulos que exploraron juntas, dejando en claro que tanto Emilia como Gina comparten el interés por el arte, el diseño y la cultura.
Las fotos del viaje reflejaron una Gina segura, posando frente a los grandes íconos de la ciudad con soltura, mientras su mamá la acompañaba entre caminatas, risas y abrazos espontáneos. Lejos de cualquier presión mediática o producción armada, lo que se vio fue un vínculo real, cargado de complicidad y disfrute.