Más de un lustro pasó desde que Jan Hurtado arribó a Gimnasia luego de romperla en el Deportivo Táchira, donde cobraba un salario de apenas un dólar. Después vinieron grandes rendimientos y el salto a Boca. No obstante, las cosas no salieron como se esperaba y el venezolano empezó deambular por varios clubes. Hasta que, en febrero de este año, el delantero regresó al Lobo y, tras ausentarse por lesión durante 113 días, este fin de semana vuelve a estar disponible para jugar.
Una trunca carrera
El primer ciclo del oriundo de El Cantón por La Plata quedó inmortalizado por sus increíbles gambetas (como aquel sombrerito de taco contra Newell’s) y sus siete goles (uno a Boca). Sumado al histórico subcampeonato del Mundial Sub 20 en 2017 con su selección, el atacante pasó a ser considerado como una de las grandes joyas de Sudamérica y su cotización alcanzó a tocar los siete millones de euros. Se rumoreaba que múltiples equipos europeos estaban interesado en él, pero el Xeneize se adelantó a todos: pagó 4,45 millones de euros y se lo quedó durante 2019.
Tras su llegada como una estrella con mucho potencial, se esperaba que Hurtado fuese el suplente natural de Ramón Ábila y peleara por entrar en el 11 titular. No obstante, nunca se ganó un lugar en el combinado dirigido por Gustavo Alfaro y apenas disputó 18 encuentros con el conjunto de La Ribera. En total, marcó dos tantos (uno contra San Lorenzo y otro a River por Libertadores) y dio dos asistencias. Sin embargo, no fue suficiente y en sus cuatro años restantes de contrato se marchó a préstamo en tres oportunidades.
¿Su paso por Boca? 18 partidos y dos goles (uno contra River).
Pero sus experiencias fueron negativas en cuanto al rendimiento individual: vistió las camisetas del Red Bull Bragantino, Liga de Quito y Atlético Goianiense. ¿Su registro? Pobre, fueron sólo 15 anotaciones entre 2020 y 2024.
Una vez terminado su compromiso contractual con Boca, quedó libre y acordó su llegada a Gimnasia en febrero de 2025. Se esperaba mucho, pero fue más de lo mismo.
En busca de la revancha
Durante el primer semestre compitió en ocho partidos, pero no aportó con ningún gol. La pretemporada iba a servir como un borrón y cuenta nueva. La idea era poner las cosas en su lugar. El delantero respondió con un muy bien nivel, mas una lesión muscular contra Argentinos Juniors en un amistoso lo marginó de las canchas.
Aún no ha sumado minutos en el actual Torneo Clausura y su último cotejo oficial fue aquel enfrentamiento contra Central Córdoba el 11 de mayo por Copa Argentina. Desde entonces, pasaron 113 días.
Ya recuperado, Hurtado está disponible para volver a jugar y buscará regresar al Fútbol de Primera el próximo lunes, cuando Gimnasia reciba a Atlético Tucumán a partir de las 17:00 en el Bosque.
Hurtado, en busca de la revancha.
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