La derrota en Corrientes, el fallo que prohíbe difundir escuchas de Karina Milei, la caída de 2,3% en el Merval y la disparada del dólar del lunes no llegó a impactar en las cotizaciones de los bonos y acciones argentinas en Wall Street, por el feriado en Estados Unidos. Pero este martes, el efecto se siente con fuerza.
En Nueva York, los bonos de la deuda argentina retroceden hasta 1,94% (el Global 41 es el que más pierde) en el denominado «premarket», las operaciones pactadas antes de la apertura del mercado. Los movimientos de los bonos siempre son más leves que las acciones, que en un día pueden llegar a caer 5% o más. Un movimiento de 2% en bonos augura un muy mal día para esos activos.
El Merval cayó 2,3% el lunes y este martes las acciones argentinas en Wall Street están en rojo: Galicia pierde 2,3% y el Macro cede 2%, también en el premarket.
Las medidas que viene tomando el Gobierno para acotar la volatilidad del mercado antes de las elecciones no parecen estar funcionando como el equipo económico esperaba.
Este lunes entró en vigencia una nueva suba de encajes bancarios que los lleva al 53,5% para sacar pesos de la plaza y evitar que se vayan al dólar.
Se esperaba que esto generara una baja del tipo de cambio. Pero el dólar minorista subió $ 25 a $ 1.385, un nuevo récord nominal. Así, el Gobierno a las elecciones bonaerenses con el dólar más cerca del techo de la banda que del piso.
Con este apretón monetario el Gobierno pretende que no queden pesos dando vueltas que se vayan al dólar. Pero la contradicción entre la política de flotación cambiaria y el apretón monetario genera inquietud en el mercado.
El viernes pasado, el Central sumó más ruido aún al sacar una nueva disposición que no les permite a los bancos cerrar el mes con una posición en dólares superior a la que tenían el día previo. El viernes 29 fue el último día hábil de agosto y esta nueva resolución les prohibió sumar dólares por encima del nivel que tenían el 28.
Entonces los dólares que no pudieron comprar el viernes salieron a comprarlos este lunes, en el arranque de septiembre.
A esto se agrega que los empleados que ya cobraron se lanzan al home banking previendo que el dólar va a seguir subiendo.
NE