Desde hace unos días, una serie de figuras de la farándula se sumergieron en un viaje de ensueño con destino a Tailandia. Un grupo de famosas se encuentra representando a la marca internacional de joyas Pandora, que para este tipo de eventos decidió convocar a Zaira Nara, Pampita, Jimena Barón, Julieta Poggio y Stephanie Demner.
Desde el pasado viernes las modelos e influencers se encuentran en la bella ciudad de Bangkok del país asiático, disfrutando de una serie de eventos únicos de la marca e instaladas en el Hotel Mandarin Oriental. Allí compartieron también un momento único con la flamante Miss Universo 2024, la danesa Victoria Kjaer.
Pero lo cierto es que la unión que muestran todas estas famosas es más que importante, ya que salen a divertirse y disfrutar de diferentes paseos. En este punto, una de las conexiones más explosivas que se ha dado fue la de Jimena y Poggio, quienes recientemente hicieron un recorrido por la gastronomía del lugar y lo compartieron en sus redes sociales.
Las famosas van recorriendo diferentes puntos de Tailandia y llevan a cabo la experiencia de ser invitadas de lujo de una conocida marca internacional de joyas. En medio de todo esto, la cantante y la ex Gran Hermano vivieron un momento único.
Las dos actrices pasearon por un mercado típico, que ofrece comida callejera, algo muy típico de la región asiática y sobre todo de Tailandia. Sin embargo, en un momento hicieron una parada técnica para probar insectos, algo muy tradicional dentro de la tradición del país y que son usualmente consumidos de diferentes maneras.
A través de un video que compartió Stephie Demner en sus perfiles, se pueden apreciar las diferentes opciones gastronómicas tailandesas, desde escorpiones, gusanos y ciempiés que se encontraban insertados en pinchos (a modo brochette). La gente come los insectos desde los mencionados palillos.
Obviamente es algo muy llamativo para aquellas personas que no están acostumbradas a este tipo de cultura. Un toque muy inusual pero que es digno de probar y animarse a experimentar, aunque obviamente siempre teniendo en cuenta que el paladar de cada uno es todo un mundo.
Jimena y Julieta se dispusieron al desafío de comer gusanos. Para ello, hicieron una especie de brindis y antes de comerlos dijeron “va entero”, como para evitar cualquier tipo de arrepentimientos en medio de la degustación. Mientras masticaban, sus caras de desagrado eran impresionantes siendo conscientes de qué estaban consumiendo, pero luego, al dar sus veredictos, coincidieron: “Tiene gusto a carne”.