A horas del comienzo de su gobierno en Estados Unidos, Donald Trump ya puso fin al uso de la aplicación CBP One, una plataforma que había permitido que alrededor de un millón de personas pudiera entrar legalmente al país con derecho a trabajar. La medida fue publicada en el sitio web de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) poco después de la asunción del líder republicano, que había enfatizado a lo largo de toda su campaña que durante su presidencia pondría fuertes límites a la inmigración.
La aplicación era utilizada para que los migrantes pudieran programar citas en ocho de los puertos de entrada de la frontera sur. Además, todas las reservas agendadas previamente fueron canceladas. Hasta hoy, se ofrecían 1.450 citas por día.
Según informó la agencia AP, CBP One fue un éxito entre los migrantes, aunque la demanda era mucho más grande que la oferta. Por día, había una media de 280.000 personas buscando plazas a finales del año pasado.
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Todas las personas que eran habilitadas a ingresar al país a través de esta plataforma lo hacían bajo “libertad condicional” migratoria. Durante la presidencia de Joe Biden, esta figura fue utilizada más que durante cualquier otra gestión desde 1952.
Originalmente, la CBP tenía el objetivo de que los agentes de aduanas programaran inspecciones, sin embargo, la administración de Biden amplió su uso a los migrantes en enero de 2023. Los defensores de la plataforma argumentaban que había ayudado a poner orden en la frontera y redujo los cruces ilegales.
Donald Trump comienza su campaña contra la inmigración
Durante su discurso de asunción, Trump adelantó: «Voy a declarar una situación de emergencia en la frontera sur«, anunció e insinuó un plan de deportaciones de los extranjeros que cometan delitos. También prometió «enviar tropas a la frontera sur para combatir» la inmigración ilegal.
Un funcionario entrante de la Casa Blanca adelantó a AP detalles sobre las órdenes que se firmarían en materia migratoria. Según precisó, estas medidas buscarán restringir el acceso al asilo, desplegar tropas en la frontera con México, suspender el programa de refugiados, obligar a los solicitantes de asilo a permanecer en México y eliminar la ciudadanía por derecho de nacimiento.
Además de estas medidas, el gobierno del presidente entrante tiene la intención de designar a los cárteles como organizaciones terroristas extranjeras, apuntando como objetivo a la pandilla venezolana Tren de Aragua. Esta organización criminal nació en Venezuela, pero se extendió lentamente hasta convertirse en una amenaza en Estados Unidos con una ola de secuestros, extorsiones y otros delitos.