Qué mal timing. Suena inverosímil, por la coincidencia espaciotemporal de una tragedia propia. Empero, Wanda Nara no reparó en el gravísimo accidente de su novio L-Gante, por el que se fracturó la clavícula y tuvo que meterse de urgencia en un quirófano para una operación.
A los pocos días de ese vuelco monumental de su pareja, que quedó registrado en imágenes que provocan estupor y asombro, la mediática tomó la extraña decisión de comprar ese vehículo tan peligroso, el que Elián Valenzuela no supo controlar y le provocó quebraduras.
¿Cómo? Wanda optó por obsequiarle a Benedicto, uno de sus tres hijos que trajo al mundo de la mano de Maxi López, tres modelos distintos de esas máquinas playeras. Sí, la ex conductora de Bake Off le dio tres bólidos a su pequeño en el marco de su cumpleaños de trece.
Luce inentendible, casi como un despropósito, aunque Nara no se detuvo en las críticas que le llovieron y que seguirán rondando su nombre en las redes sociales por estos obsequios. Además, muchas voces consideran que se trata de ostentación por la inversión millonaria que conlleva la adquisición de esas maquinarias.
WANDA NARA LE COMPRÓ 3 CUATRICICLOS A SU HIJO DE 13 AÑOS
En su afán desesperado por abrir las puertas de su cotidianidad y de cargar con frenesí su cuenta de Instagram, Wanda colgó fotos del adolescente, en esas mini vacaciones en Pinamar, con sus regalos y escribió: “Que seas siempre así de feliz. Te amo, mamá”.
Por su parte, Mauro Icardi pegó el grito en el cielo porque se filtraron videos de sus dos pequeñas, Isabella y Francesca, manejando cuatriciclos sin casco, lo que implica un altísimo riesgo para esas niñas. Un riesgo que se comprobó con el accidente de L-Gante.